Si no llevas 50 o más encima, difícilmente conozcas o hayas jugado alguna vez al gallito ciego. Juego de pibes, en la vereda o en casa, que básicamente al sorteado por ta-te-tí o piedra, papel y tijera, se le vendaban los ojos y se le daban un par de vueltas como para desorientarlo bien, antes de contar hasta 10 en voz alta y en el lugar, tiempo suficiente para que el resto se alejara lo suficiente. Nueveeee?... Y Diez! Y a ciegas comenzaba una especie de cacería de brazos extendidos como la momia y al primero que lograba agarrar, tenía que adivinar de quién se trataba. Si acertaba, el cazado era el próximo gallito y vuelta a empezar.
Claro, después la vida nos enseña a abrir los ojos y todo se vuelve más fácil o al menos, más predecible, salvo para los no videntes que nos llevan una ventaja significativa, porque aprenden a escuchar mejor que el resto y desde muy temprana edad.
Y lo que de chicos fue un juego y aún contando con maravillosos sentidos como la vista y el oído, y sobre todo el "sentido común", que nos tira un "ausente con aviso" para no ofender a una gilada hipersensible a casi todo, nos volvemos a vendar los ojos para resolver "al tanteo" los efectos colaterales de lo que romantizamos como "Amor", que ablanda y dignifica cualquier expresión auto-peyorativa que se nos ocurra colgarnos cual cartelito explícito.
Si claro, "el amor es ciego", o por amor hacemos pelotudeces realmente inexplicables, o incluso hasta soportamos pasar por idiotas para conformar al otro (otro/otra/otre, no empecemos con la pelotudez distractiva y decadente, si? Vos entendés que no hablamos de género, que según mi abuela era un pedazo de tela).
Pero en todo caso, eso ya no es amor, sino más bien dependencia, incluso presidio, que viene de presidiario, o sea de un gil que está preso (aclaro por las dudas, viste?). Que dicho sea de paso, parece que con lo que parecía amor y se vuelve dependencia, sucede lo mismo que con los condenados a más de 20 años: se "Institucionalizan", al punto que cuando quedan libres no entienden la Libertad y lo que significa, no la pueden manejar, y vuelven a reincidir porque extrañan el "sistema".
Si, entendiste bien. La pareja es también un "sistema", lo mismo que la familia. Se establecen roles con la particularidad de que todos ellos dependen de la existencia y consistencia de los demás: un rol de Padre o Madre no tendría sentido si no hay hijos, lo mismo que un rol de hijo en ausencia de Padres o Tutores, o el rol de hermano siendo hijo único. Obviedad que raya la pelotudez pero que nos hace seguir confundiendo roles e incluso inventando algunos como si fueran "cargos ñoquis", que además de no tener sentido, aparecen nomás el día de cobro.
Y ahí vamos! Nos bajamos la bandana a la altura de los globos oculares y bien mareaditos por una historia con más vueltas que una calesita, arrancamos estirando los brazos con la esperanza de chocar con un abrazo, o con una teta por lo menos! Con toda la furia recibimos un: "te podés dejar de joder!?"
Entonces buscamos aliados y razones afuera, con los que alcanzan 2 vueltas de mate para darnos cuenta que están rajando de lo mismo y algunos hasta con la venda en el bolsillo para la vuelta, y no se dan cuenta que el problema está adentro, ahí a dónde quieren volver a arreglar todo sin una puta herramienta y a ciegas.
No te emplomes, pero sabélo: afuera no es una solución. Es un camino. Y es sólo de ida, y como mucho tenés que reemplazar la venda por un casco, saldando las viejas deudas que tenés con tu cansado corazón.
Nada, ganas de joder y revolverte un poco las tripas que tenés ahí, justo detrás de dónde de ponés la venda de gallito ciego.
Publicidad:
Ariel Villar
SexaGenioS
Comments